lunes, noviembre 28, 2005

A veces pienso que la idea de que todo en el mundo es cíclico es falsa. En ocasiones me parece meramente un consuelo espiritual reconfortante pero vacío, como lo fueron los dólmenes para los hombres de las cavernas o lo fue Jehová para los hombres de hace veinte siglos. Un mero placebo para curar nuestros miedos ante la absoluta incertidumbre que rige nuestra vida. "Todo mejorará, siempre mejora, no hay mal que cien años dure y en esos años todos calvos". Un concepto muy tentador que nos permite delimitar todo con suma facilidad. Arriba y abajo. Igual que delimitamos blanco y negro, dios y demonio, vida y muerte, normal y marica. Y darnos la vuelta, abrazar la almohada y dormir con tranquilidad.

Pero hoy no. Hoy pienso que existen esos ciclos, que realmente existen ondas dentro del caos, pero que son muchos ciclos a la vez, tantos que sólo llegamos a intuirlois en ocasiones. Hoy he visto una aparición de otro mundo mientras volvía de firmar el finiquito y de entregarme de vuelta a la incertidumbre, que me ha acogido de brazos abiertos como una madre acoge a un hijo que ha estado mucho tiempo en ese árido reino lejano al que llaman "estabilidad". Hoy me creo que a todo mal le sucede un bien.

Y aún así abrazo la almohada sin poder dormir.

2 comentarios:

como dice mi amigo drexler -nada se pierde, todo se trasforma-
gracias por TODO,un abrazo fuerte fuerte
(te habrás quedado con los pantalones no?, q para casa van muy bien)

Por Anonymous Anónimo, 29/11/05 11:52  

Ja, ja, ja. Gracias, corazón, espero no eprderte de vista. Me piemso quedar con los pantalones prototipo, eso sí. ;)

Por Blogger Gusarapo, 29/11/05 18:15  

Comenta

<< Principal